martes, 7 de julio de 2009

Como un Museo Histórico, pero a miles de kilómetros

En un mundo dominado por la era de Internet, hay cosas que contribuyen de manera muy positiva a la difusión de la cultura. Las distancias se acortan y lo que antes era inalcanzable de poder conocer, hoy está a solo un “clic”. La Red cuenta ahora con un caudal cultural de suma importancia contenido en un solo site, La Biblioteca Digital Mundial.

Este nuevo sitio pone a disposición en Internet, de manera gratuita y en formato multilingüe, importantes materiales fundamentales de culturas de todo el mundo. Con los objetivos de promover el entendimiento internacional e intercultural; ampliar la cantidad y la variedad de contenidos culturales en Internet y permitir a las instituciones asociadas reducir la distancia digital dentro de y entre los países, La Biblioteca Digital Mundial acerca al público en general la posibilidad de descubrir, estudiar y disfrutar de los tesoros de la cultura mundial en un único lugar, de diversas maneras.
Entre el material que podemos contemplar en este sitio se encuentran manuscritos, mapas, libros poco comunes, partituras musicales, grabaciones, películas, grabados, fotografías y dibujos arquitectónicos. Los artículos de la Biblioteca Digital Mundial se pueden explorar de manera sencilla según lugar, época, tema, clase de artículo e institución colaboradora, o pueden localizarse mediante una búsqueda abierta, en varios idiomas. Las herramientas de navegación y las descripciones de contenidos están disponibles en árabe, chino, inglés, francés, portugués, ruso y español.
La Biblioteca Digital Mundial fue desarrollada por un equipo de la Biblioteca del Congreso de los EE.UU., con colaboraciones de instituciones asociadas de muchos países, el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, las Ciencias y la Cultura (UNESCO), y el apoyo financiero de varias empresas y fundaciones privadas. Una de las entidades que brindó aportes financieros fue Google Inc. con 3 millones de dólares para el desarrollo inicial del plan y prototipo de la Biblioteca Digital Mundial. También lo hizo la Fundación Qatar con igual cifra para el apoyo general, y Microsoft Inc., aportó un millón de dólares también para el apoyo general del sitio.
El comienzo de la idea fue crear una colección en Internet, de fácil acceso, de todos los tesoros culturales del mundo que contaran las historias y destacaran los logros de todos los países y culturas, promoviendo así la sensibilización y el entendimiento intercultural.

Del Periodismo en Internet al Periodismo Multimedia

El cambio se fue produciendo a lo largo de los últimos trece años, en donde el periodismo en Internet ha ido configurando sus propias características y modos de producción. En los comienzos los cibermedios copiaban el lenguaje del diario impreso, pero con el correr del tiempo han abandonado esa “mala costumbre”. Poco a poco este novísimo campo del periodismo ha ido adoptando sus propias características y ha aprovechado notablemente las ventajas que le ofrece la Red.
Edición digital de The New York Times, año 1996.

Actual página web de The New York Times
El diario digital presenta grandes ventajas respecto al diario tradicional, la principal es que tiene un alcance mundial, mediante la Red se leerá en cualquier rincón del planeta, se actualiza constantemente, la información se transmite prácticamente en tiempo real y es interactivo, el lector tiene participación en el proceso comunicativo. Los receptores participan en la Web 2.0.
En tanto, este diario digital reúne los lenguajes de los tres medios masivos de comunicación: la radio, la televisión y la prensa escrita, sacándole provecho a las ventajas de cada uno de ellos. Según Lizy Navarro (Universidad Complutense de Madrid), “lo que hoy conocemos como el periódico en línea se convirtió en un medio de comunicación que reúna la profundidad de la prensa escrita, la simultaneidad de la radio y la imagen de la televisión”.
El lenguaje periodístico en Internet tiene tres características: la hipertextualidad, una forma de escritura que no es secuencial y permite fragmentar el discurso en nodos o apartados, que van unidos entre sí a través de enlaces (‘links’); la multimedialidad, que es el carácter multimedia de los cibermedios, relacionado con la posibilidad de combinar en un solo mensaje texto, imagen y sonido; y la interactividad, que refiere a la respuesta que el usuario emite respecto a la información que le presenta el cibermedio.
Finalmente, el periodismo multimedia surge como consecuencia de la formación de las “empresas multimedia”, estos conglomerados de medios de comunicación, ya que al ser propiedad de una sola empresa el periodista puede, en algunos casos, producir contenidos para los distintos soportes. A esta integración de diversos medios o soportes se la conoce como convergencia multimedia, y ésta hace que el periodista asuma una mayor responsabilidad y protagonismo en el proceso de producción informativa.

lunes, 6 de julio de 2009

El Periodismo Multimedia

Al ver televisión o leer un periódico estamos frente a algunas aplicaciones del periodismo multimedia. Si nos referimos a su origen etimológico la palabra “multimedia” (“multi”- ‘numeroso’, y “media”- plural de médium: ‘medios’. ‘intermediarios’) hace alusión a varios medios. Y eso encontramos en la televisión cuando, por ejemplo, vemos al presentador de un noticiero, escuchamos su voz y leemos la franja (graff) de texto casi al final de la pantalla.
Ramón Salaverría, señala que el término “multimedia” también tiene un enfoque instrumental, relacionado a las empresas de comunicación. De este modo, desde mediados de la década de los noventa empezaron a surgir corporaciones multimedia, los llamados “Grupos”, o “corporaciones multimedia”, los cuales agrupan a distintos medios (periódicos de circulación nacional y regional, estaciones de radio y canales de televisión).
El periodismo multimedia –llamado también periodismo multiplataforma– no es una nueva modalidad del periodismo, sino que es una actividad periodística que consiste en elaborar contenidos informativos combinando los lenguajes del periodismo escrito, radial y televisivo.
El desarrollo del periodismo multimedia es uno de los factores que más está modificando el ejercicio del periodismo. “Los grupos de comunicación han pasado a multiplicar sus intereses mediáticos con la adquisición de emisoras de radio, televisión y el lanzamiento de publicaciones en Internet”, señala Salaverría.
Lo que determina que un contenido sea llamado multimedia y que, además, sea periodístico es su formato y desarrollo. Por ejemplo, la prensa escrita y la televisiva son multimedia, pero en menor grado que la Web, ya que la prensa combina textos e imágenes estáticas; la televisión, imágenes en movimiento y sonidos.
En cambio la Web alcanza la multimedialidad suprema al combinar textos, imágenes estáticas y dinámicas, y sonidos, más aún cuando se habla de multimedialidad por integración, como lo es un reportaje multimedia.
Los avances de la tecnología digital van simplificando las labores ya no solo de tomar una fotografía, sino también de grabar sonidos y videos, y por ello es de prever que día a día los periodistas seguirán acumulando tareas.

martes, 2 de junio de 2009

El Periodista de Hoy

Cuando en los comienzos de los periódicos, apariciones pequeñas ni por asomo como hoy se conocen y realizadas a mano con pluma, y años más tarde la difícil tarea de lograr su impresión, quién podía imaginar los cambios que podrían surgir hasta llegar a hoy, en donde parece que ya no habrá papel.
La labor periodística se ha convertido en una constante selección de información que llueve por doquier. Teléfonos celulares, computadoras, Internet, diarios onLine, blogs personales, seguidores, comentarios, radio, televisión, todos los medios posibles se utilizan para la recaudación de información para ser procesada y editada al momento. Cuando antes esperábamos al menos algunas hora para profundizar sobre alguna información, o a la edición del periódico del día siguiente, hoy se acude rápidamente a Internet, quienes tienen acceso inmediato, o a radio y televisión, porque las informaciones se encuentran actualizadas a cada segundo.
Lo instantáneo de la información lleva al periodista a estar en constante conexión con el mundo informativo, a tener que actualizar su información de manera más frecuente y con menos tiempo para editar sus notas. Todo debe estar publicado “ahora”, y ese es el problema más usual con el que se encuentran los receptores de las noticias, dado que el deber de cumplir con la actualización e instantaneidad, conducen a la falta de profundidad en los temas desarrollados.
El cumplir con esa actualización debida es una falencia que se da en muchas publicaciones que podemos leer, aún cuando los reporteros editan sus notas directamente desde la calle y no hasta llegar a la redacción para la cual trabajan. Las nuevas formas de comunicación, sobre todo Internet, han modificado sustancialmente la rutina periodística, por lo que la selección de la información no siempre se cumple.
Por otro lado, estos cambios han permitido que la audiencia conozca y pueda comunicarse con los protagonistas de los textos que leen. Ya es común que cada periodista, además de cumplir con su tarea profesional, posee un Blog en donde escribe sobre los temas que le interesan y de esta manera interactúa con los lectores.
Todo es en Internet y “ahora”, aquí está toda la información, las fuentes, las imágenes, hasta el audio que no llegamos a escuchar. La velocidad a la que corren los periodistas de hoy, no les permite llegar a la Olivetti nunca más.


lunes, 1 de junio de 2009

Sociedad de la Información o del Conocimiento ¿Qué entendemos de estos conceptos?

Las profundas transformaciones producidas por la acelerada introducción en la sociedad de la inteligencia artificial y de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC), han llevado a debate qué se entiende por los conceptos de sociedad de la información y sociedad del conocimiento.
En primer lugar hay que conocer qué significan. En la última década, la expresión “sociedad de la información” se ha consagrado como el término hegemónico, debido al consenso que recibió de las políticas oficiales de los países más desarrollados. Sin embargo el término data desde 1973, cuando el sociólogo estadounidense Daniel Bell introdujo la noción de “sociedad de la información”, formulando que el eje principal de ésta será el conocimiento teórico y advierte que los servicios basados en el conocimiento habrán de convertirse en la estructura central de la nueva economía y de una sociedad apuntalada en la información, donde las ideologías resultarán sobrando.
Esta expresión reaparece con fuerza en los años 90, en el contexto del desarrollo de Internet y de las TIC. “Sociedad de la información”, como construcción política e ideológica, se ha desarrollado de la mano de la globalización neoliberal, cuya principal meta ha sido acelerar la instauración de un mercado mundial abierto y “autoregulado”.
La imagen pública de las tecnologías de la comunicación, creciente en la globalización económica, esta asociada a los aspectos más “amigables” de la globalización, como Intenet, telefonía celular, etc. Por lo que la sociedad de la información asumió la función de “embajadora de buena voluntad” de la globalización, cuyos “beneficios” podrían estar al alcance de todos, si solamente se pudiera estrechar la “brecha digital”.
La noción de “sociedad del conocimiento” surgió hacia finales de los años 90 y es empleada particularmente en medios académicos, como alternativa de algunos a “sociedad de la información”. Según Abdul Waheed Khan (subdirector general de la UNESCO para la Comunicación y la Información): “la sociedad de la Información es la piedra angular de las sociedades del conocimiento. El concepto de “sociedad de la información” está relacionado con la idea de la “innovación tecnológica”, mientras que el concepto de “sociedades del conocimiento” incluye una dimensión de transformación social, cultural, económica, política e institucional, así como una perspectiva más pluralista y desarrolladora. Es preferible el concepto de “sociedad del conocimiento” ya que expresa mejor la complejidad y el dinamismo de los cambios que se están dando, el conocimiento en cuestión no sólo es importante para el crecimiento económico sino también para empoderar y desarrollar todos los sectores de la sociedad”.
Manuel Castells, investigador y autoridad reconocida en la materia, prefiere el término “sociedad informacional” al de “sociedad de la información”, al señalar que si bien el conocimiento y la información son elementos decisivos en todos los modos de desarrollo, “el término informacional indica el atributo de una forma específica de organización social en la que la generación, el procesamiento y la transmisión de información se convierten en las fuentes fundamentales de la productividad y el poder, debido a las nuevas condiciones tecnológicas que surgen en este período histórico”.
Finalmente, cualquier definición que use el término “sociedad” no puede describir una realidad circunscrita a Internet o a las TIC. Internet puede ser un nuevo escenario de interacción social, pero esta interacción está estrechamente integrada al mundo físico y los dos ámbitos se transforman mutuamente.

sábado, 30 de mayo de 2009

Hacia una sociedad multimediática

Es curioso. Si miramos los anuarios económicos o los balances de cuentas de las empresas que sabemos involucradas en el desarrollo del mundo multimedia y buscamos los epígrafes dedicados explícitamente a "multimedia" nos llevamos un chasco, porque o no existen o contienen cantidades ridículas. Y, sin embargo, es patente que bajo la apariencia circunstancial de esas cuentas existe un menudeo de actividades que nos conducen desde una sociedad mediática a una sociedad multimediática, basada en la televisión, la informática y las inforpistas de banda ancha.
Una sociedad multimediática es la forma avanzada de sociedad de la información, y ésta cada uno la imagina como quiere o como le conviene, desde Clinton y Gore, con su propuesta de Infraestructura Nacional de la Información (1993) hasta Bangemann, en nombre de la Unión Europea, con su informe de recomendaciones para una sociedad global de la información (1995). Indefectiblemente, los políticos que acuñan estas propuestas y los expertos e industriales que los animan y les suministran ideas, pronostican grandes beneficios para la economía general, la industria, la educación, la sanidad y otros servicios sociales. Consigna psicológica: las inforpistas multimediáticas son una plataforma revolucionaria para las industrias de la cultura y del entretenimiento del siglo XXI.
En un libro reciente, titulado "Sueños Globales", sus autores, Barnet y Cavanagh, vinculan a todos estos progresos la creación de cuatro entramados de la actividad comercial mundial y su dominio por un puñado de empresas multinacionales: el Bazar Cultural Global, el Centro Comercial Global, el Lugar de Trabajo Global y la Red Financiera Global.
El Bazar Cultural Global es el sector mundial más nuevo y el más universal en su alcance. Tal vez sea un mutante hipertrofiado de la Aldea Global, de McLuhan. Películas, televisión, radio, música, revista, camisetas, juegos, juguetes y parques de atracciones son los medios de comunicación que permiten la difusión de imágenes globales y la preparación de sueños globales. Las estrellas de rock y los titanes de Hollywood son verdaderamente productos globales. La gente utiliza los mismos artefactos electrónicos para ver o escuchar las mismas canciones e historias producidas comercialmente en todo el planeta.
Los críticos, por su parte, profetizan Homogeneización (y deterioro) Cultural Global (el pensamiento único), consumismo a ultranza, pérdida de soberanía nacional, más desempleo, info-ricos e info-pobres y otros males.
Lo que sí podría vaticinarse seguramente es que habrá grandes sorpresas. Algunas de las cosas que se piensa que van a ocurrir en el terreno social y cultural no sucederán, y no debería extrañarnos demasiado, dada nuestra tendencia a razonar atrapados en el marco conceptual de una tecnología anterior, que es precisamente lo que rompe la nueva tecnología emergente. En el terreno económico, bastantes empresas pondrán sus huevos en el escenario o en la cesta equivocada, o simplemente pondrán huevos adecuados pero insuficientes en la cesta correcta, ya que hoy por hoy resulta una incógnita cómo reaccionarán las estructuras sociales y las personas individuales a los cambios derivados de estos rompimientos.
En todo caso, con mayor o menor acierto en su aplicación, el proyecto multimedia no se detendrá, porque responde a la naturaleza humana de dotarse de una prótesis tecnológica que se acomode, amplíe o sustituya a sus sentidos y a los tipos de información que procesa su cerebro.